martes, 3 de junio de 2008

Ruta de senderismo: Sierra del Carche - Jumilla

Nueva jornada de autobús en la que, de nuevo, pasamos más tiempo en él que luego andando. Esta vez el destino es la Sierra del Carche, junto a la ciudad de Jumilla, en el Nordeste murciano, a 69 kilómetros de Murcia y a 120 de Cartagena.

Antes de llegar al punto de partida, paramos en un restaurante de carretera cercano a Jumilla para recoger a Antonio, un guía de montaña de esta localidad, que nos va a servir de guía y anfitrión en nuestro recorrido de esta mañana por esta sierra.

Con Antonio a bordo del autobús para indicarnos el camino, salimos de nuevo a la carretera y poco más adelante del restaurante cogemos a la derecha el cruce de Pinoso y unos centenares de metros después, nos desviamos a la izquierda, por una carretera que lleva a las salinas de "Jumisal S.A.", según pone el indicador de la carretera. Lo llamo carretera por llamarla de alguna forma y porque está asfaltada, pero es muy estrecha (solo cabe el autobús), con firme en no muy buen estado y muchas curvas, además de fuertes pendientes (bueno, fuertes pendientes para el autobús cargado de gente).

4 kilómetros transitando por esta carretera y llegamos a las instalaciones de la empresa salinera que nunca pensé que podría existir en estas tierras, tan alejadas de la costa y del mar, que es la fuente natural de la sal. Parece ser que el agua procede de unos manantiales subterráneos, que son conducidos a extensas balsas donde la evaporación hace el resto el resto del trabajo (como en todas las salinas). Este agua, sin ser agua marina, tiene bastante concentración de sales, o al menos lo suficiente como para que sea rentable su extracción y posterior envasado. Lo que desconocemos es si sólo es Cloruro Sódico o lleva también otros tipos de sales y si la sal que se obtiene es para el consumo humano o tiene otros fines. Todos estos detalles tampoco nos los supo explicar el guía.

El autobús se queda en una gran explanada de estas instalaciones y nosotros comenzamos nuestra marcha aproximadamente a las 11 de la mañana. La altura en el punto de comienzo es de 600 metros s.n.m. El día es fresco y está nublado amenazando tormenta. Iniciamos esta marcha por "una senda que no es senda", es decir, atravesando montes y bancales de almendros, con una fuerte pendiente, eso sí, que nos pilla de improviso, en frío, tras más de dos horas de autobús y nos resiente un poquito.

Tras un corto tramo de rocas, un tanto difícil de subir, llegamos a una cómoda y ancha pista forestal, a 700 metros de altitud, donde nos reagrupamos. Formamos aquí dos grupos: los que han tenido dificultades en esta última subida (5 en total) forman un pequeño grupo con uno de nuestros guías y continúan ascendiendo por la pista de tierra. El resto (prácticamente todos) continuamos con Antonio por lo que llaman "la senda de los leñadores".

Esta senda sí está bien marcada y señalizada con frecuentes mojones de piedra. No es un sendero propiamente dicho ni está marcada como tal (con las rayas blancas y amarillas) porque en esta sierra del Carche (que es un parque Regional) aún no hay catalogado y homologado ningún sendero (a pesar de ser muchos los que la recorren, además de la pista forestal, que lleva hasta la cumbre, a 1371 metros de altura).

Prácticamente durante toda la ascensión, la densa pinada nos impide ver el paisaje. Según nos cuenta el guía, pasamos junto al Barranco del Infierno y transitamos por zonas donde abundan los fósiles marinos. Parece ser que esta zona estuvo sumergida y de ahí la existencia de estos fósiles (quizás, y esto es suposición mía, que las aguas salinas tengan algo que ver también con esta circunstancia). Pero es difícil de imaginar que esta zona que ahora está a más de 1.000 metros de altitud y tan retirada de la costa mediterránea, hubo un día en que estaba cubierta por las aguas de este Mar Mediterráneo.

Para confirmar lo que nos dice Antonio, encontramos algunos fósiles de lo que podrían haber sido almejas u otra clase de molusco, y que los guardan como recuerdo los afortunados descubridores. Yo también tengo ocasión de ver y grabar un fósil de lo que parece ser un "Nautilus" pero no lo guardo debido a su gran tamaño y peso.

Nos llama la atención algunos pinos numerados y la explicación está en que son puestos de cazadores para la caza del jabalí. Durante la ascensión, paramos en dos ocasiones en sendos collados donde se abre algo la pinada y nos deja ver el paisaje, básicamente una llanura extensa y despoblada, el núcleo urbano de Jumilla al pie de una montaña donde se eleva un castillo y los barrancos llenos de pinos del Carche con las cumbres de esta sierra donde ya se puede apreciar (debido a la proximidad en que nos encontramos) las antenas (supongo que repetidor de T.V.) y una construcción de madera con el tejado en V invertida con gran inclinación (típico estilo de alta montaña, para evitar la acumulación de nieve) que era en su día un puesto de guardabosques, pero que ahora está abandonada y ha sido sustituida por otras torres de vigilancia colocadas en diferentes cumbres.

Llegamos de nuevo a la pista forestal y giramos a la izquierda por ella, continuando ascendiendo hasta llegar a un paraje donde está un pozo que según el cartel es el pozo de la Nieve, pero que resulta ser en realidad el "pozo del Mosquito", pues los pozos de las nieves están algo más arriba y son construcciones de piedra similares a los que vemos en Sierra Espuña. Esto de aquí es un aljibe destinado a recoger el agua de lluvia que corre por las laderas de la montaña.

Estamos a poco más de 1.100 metros de altitud, apenas unos 200 por debajo del pico más alto (pero a varios kilómetros de distancia de él). Paramos en este lugar durante 20 minutos para la comida y a continuación comenzamos el descenso por la misma pista. Llegamos a un punto en el que, para atajar, dejamos la pista forestal y continuamos monte a través, entre pinos, arbustos y piedras, hasta llegar a alcanzar de nuevo mucho más abajo, la pista de tierra, en un punto donde se encuentra el aljibe, y donde estaban los miembros del primer grupo (los que habían seguido por la pista desde el principio) esperándonos.

Seguimos bajando por la pista y aligeramos el paso pues empiezan a caer algunas gotas de lluvia que podrían convertirse en una tormenta pero que, afortunadamente no pasaron de ser eso: unas cuantas gotas. Pasamos junto a otro aljibe de recogida de aguas que parece estar restaurado hace poco. Dejamos la pista y cogemos la "senda que no es senda" que baja de nuevo hasta llegar a las salinas y la explanada donde está el autobús. Hemos hecho en total 10,7 kilómetros. Son las 14.40 horas.

Completamos el viaje, y ya fuera de las actividades de senderismo (aunque algo tuvimos que subir para llegar), con una visita guiada al Monasterio de Santa Ana de Jumilla, donde un sacerdote franciscano nos muestra y explica la gran cantidad de reliquias del museo y los cuadros y objetos de gran valor histórico de las demás dependencias y de los jardines. Todo ello muy acelerado por la cantidad de personas que íbamos y por la falta de tiempo, pues creo yo que para ver y asimilar todo lo que aquí se guarda haría falta un día entero (si no más).

Ruta de Senderismo: Castillitos - Cala Salitrona

RECORRIDO: Castillitos - Cala Salitrona.
Duración: de 3 a 3,5 horas. Aproximadamente 6 Ktms.
Desnivel: cota máxima alcanzada: 349 m. en la Batería del Atalayón.
Dificultad: fácil.
Consejos para la marcha: Llevar agua suficiente ya que no se encuentra ningún punto de abastecimiento durante la ruta. El itinerario es de ida y vuelta por el mismo sendero. Llevar cámara de fotos o de video: las vistas son magníficas, calzado cómodo preferiblemente botas de tréking o tenis, gorra para el sol, y bolsas donde poder depositar la basura que podamos originar. Ropa adecuada a la época del año que se realiza la ruta.

Epoca aconsejable: cualquier época es buena pero es aconsejable en Primavera y Otoño o

Ruta de Senderismo: Salinas de San Pedro del Pinatar

Las salinas de San Pedro del Pinatar son el humedal más conocido y apreciado de la Región de Murcia. En 1985 se aprobó definitivamente un Plan Específico de Protección que incluía, en sus 700 hectáreas, la mejor representación de salinas, playas y dunas del entorno del Mar Menor, junto con las Encañizadas y pequeñas muestras de otros interesantes ecosistemas (saladares, carrizales, etc.).

Situado al Este de la Región, a caballo entre el Mediterráneo y el Mar Menor, el complejo ambiental de las salinas está enclavado en el sector Norte de La Manga, barrera que cierra la citada laguna litoral. Su límite Sur son las Encañizadas, instalaciones tradicionales de pesca en la comunicación entre el mar y la laguna, y el Norte el antiguo poblado de pescadores de El Mojón, fronterizo con la provincia de Alicante. Al Este, las dunas y el pinar del Cotorrillo, y las playas del Mojón, Barraca Quemada, Torre Derribada y La Llana, separan a las salinas del Mediterráneo, mientas que por el Suroeste solo una estrecha mota sirve de límite con el Mar Menor. Por el Este y el Noreste las bordean saladares y carrizales que van siendo paulatinamente sustituidos por urbanizaciones.
La parte del parque visitada en esta ocasión ha sido la zona Norte. Partimos del puerto y el Centro de Recursos Marítimos, por la playa de la Torre Derribada hasta la Playa del Mojón y el límite norte del parque, en el pueblo de El Mojón. Pasamos por las dunas y arenales y el pinar del Cotorrillo, cerca del cual hay una torre de observación de aves y una laguna donde logré ver una colonia de flamencos (aunque aún no era la temporada "alta", pues era comienzo de primavera). Los textos están sacados de los diversos carteles informativos que nos vamos encontrando a lo largo del recorrido.

El avance de las dunas móviles.
Detrás de la línea de playa encontrarás un cinturón de dunas móviles que se desplazan según sopla el viento. Van siendo gradualmente fijadas por la vegetación conforme nos internamos hacia el interior del espacio protegido.

El viento es el responsable de la formación de las dunas: en la costa, el viento sopla hacia el interior, arrastra la arena que el mar deposita en la playa la acumula formando verdaderas montañas móviles que avanzan con cada nuevo golpe de viento.

Vegetación

Viven especies vegetales adaptadas a suelos pobres en nutrientes como el Barrón o el Lirio de Mar.

Fauna

Destaca un coleóptero considerado en peligro de extinción: el Scarites eurytus; reptiles como el Eslizón ibérico y la lagartija colirroja. Estas son difíciles de ver durante el día ya que se entierran en la arena o se esconden entre la vegetación para protegerse del sol. También habita aquí el conejo, que para refugiarse excava madrigueras utilizadas en ocasiones por el Tarro Blanco.

En este hábitat tan duro para la supervivencia, algunas plantas han desarrollado originales adaptaciones. En el caso del Barrón, para evitar ser enterrada por la arena, va echando brotes nuevos en la dirección que lleva la duna.

Las aves.
Las aves se orientan con ayuda de las estrellas y del sol en sus viajes migratorios junto con una excelente memoria fotográfica. Son capaces de volver al mismo lugar año tras año recorriendo grandes distancias, llegando algunas desde Europa Oriental y África.

Las aves acuáticas son las principales representantes de este Espacio Natural. Algunas provienen de diferentes lugares de África y Europa, otras residen durante todo el año en las Salinas. Podemos agruparlas según el hábitat donde se encuentran. Así, en las orillas habitan el Correlimos y el Vuelvepiedras, en las charcas poco profundas están la Garza real, la Avoceta y el Flamenco, y en las charcas más profundas el Tarro Blanco.

En la zona de contacto arenas-salinas, observarás los saladares. Están formados por las plantas halófitas, que se adaptan bien a la salinidad. Por ejemplo, los Almarjos y Tarajes. Buscando alimento y protección encontrarás Alcaravanes y pajarillos como las Currucas, cogujadas comunes y terreras.

Los Tarays evitan la pérdida de agua a través de sus hojas: si observas detenidamente podrás apreciar los pequeños cristalitos de sal en sus hojas, que la planta elimina a través de ellas.
El pinar del Cotorrillo
El pinar de repoblación formado por el Pino Carrasco, junto con otras especies de matorral como lentiscos y espinos negros, se plantaron para evitar el avance de las dunas móviles que amenazaban con invadir la infraestructura salinera. Este pinar hoy en día se denomina del Cotorrillo o Coto de las Palmeras. Las raíces del pinar fijan las dunas y por tanto el suelo se consolida. Estas nuevas condiciones ambientales hacen que se asienten una gran variedad de arbustos entre los cuales encontramos la Sabina, que antiguamente se extendía por toda la costa murciana. Hoy apenas quedan una docena de ejemplares que sobreviven en esta zona.

El pinar proporciona alimento y abrigo a una variada fauna como el verderón, el Pito real, la curruca cabecinegra, etc.

Los pinos aparecen retorcidos y parcialmente secos por un efecto característico de la zona denominado "maresía", debido al arrastre por el viento de partículas de agua con alta concentración de sal que impide el desarrollo de los árboles por la parte de levante.
Vegetación
La salicornia engrosa sus hojas y tallos para almacenar agua. Siemprevivas y Taray eliminan el exceso de sal a través de las hojas y los juncos, para adaptarse, las hojas adultas cargadas de sales, se secan y mueren mientras que las jóvenes pueden seguir acumulando sales en un ciclo recurrente.

El Espacio Natural de San Pedro del Pinatar ofrece variedad de plantas adaptadas a las duras condiciones ambientales. Encontramos especies que han desarrollado diferentes tipos de adaptación para su supervivencia como el Barrón, que para evitar ser enterrada, emite nuevos brotes en la dirección en que avanza la duna. El lirio de mar desarrolla raíces muy profundas para poder llegar al nivel del agua. La margarita marítima adquiere aspecto achaparrado para protegerse del viento.

Ruta de Senderismo: Cabezo del Puerto - Murcia

Duración: de 3 a 4 horas (subida y bajada).
Desnivel: cota máxima alcanzada: 531 m. en la cumbre.
Dificultad: Baja.

EL RECORRIDO

Salimos de Murcia, por la autovía, en dirección Cartagena y pasada la salida que va a La Arrixaca, tomamos la siguiente salida, que lleva a La venta de La Paloma, El Palmar y MercaMurcia (salida 403 de la autovía). Al salirnos, tomamos a la izquierda para coger la vía de servicio (pone un letrero "Urbanizaciones"), llegando de esta forma a unas cuantas casas y chalets diseminados que son las Casas del Portazgo. Tras la última casa hay una gran explanada donde dejaremos el vehículo.

Este es el punto de comienzo de la ruta que lleva a la cima del Cabezo del Puerto, y así lo

Ruta de Senderismo: Morrón de Sierra Espuña

Finca Caruana-Pozos de La Nieve.

Duración: de 6 a 7 horas.

Desnivel: cota máxima alcanzada 1.300 m. en los pozos y mínima en Caruana 800 m.

Dificultad: recorrido largo y con dificultad media, los primeros km. se realiza en constante subida durante unas 3 horas aproximadamente hasta alcanzar los pozos de La Nieve, el resto es en constante bajada hasta su final.

Consejos para la marcha: es un itinerario circular con principio y fin en el mismo lugar; se aconseja llevar ropa de abrigo si se realiza en invierno y otoño, ropa impermeable para las posibles lluvias, el calzado debe de ser bota tipo tréking o montaña, agua (encontraremos manantiales durante el camino) para los primeros tramos, gorra y por supuesto prismáticos y cámara de fotos: las vistas son impresionantes y muy bonitas.

Epoca aconsejable: cualquier época es buena pero es aconsejable en Primavera y Otoño.

EL RECORRIDO:

Iniciaremos el recorrido en la finca Caruana que se encuentra a unos 5 km. de Aledo, y desde allí tomaremos dirección Norte por una senda marcada con las señales de P.R. dirección a la casa del Purgatorio. Avanzaremos hacia el Noroeste hasta encontrar una cadena que nos da paso al Barranco de Enmedio viendo a nuestra derecha el Collado Pilón.

Empezaremos el ascenso por la carretera forestal llegando a un punto que encontramos una carretera estrecha que se sale del camino: ésta será la referencia para ascender por una estrecha bajada de aguas hasta la casa forestal. Bordeando la casa por su parte Norte se encuentra una senda de pedriza que termina en la casa de La Carrasca, una explanada con preciosas vistas del Valle del Guadalentín y a unos 50 m. se encuentra la fuente de La Carrasca (el agua es potable y muy buena).

Siguiendo hacia el Norte en un pronunciado ascenso encontraremos dos bifurcaciones: tomaremos la de la izquierda hasta llegar a una pista forestal ancha que tomaremos a la derecha. A unos 50 m. encontramos un cruce que tomaremos a la izquierda siguiendo en ascenso por el Barranco de la Carrasca dejando el Macizo Espuña siempre a nuestra derecha.

Siguiendo esta senda entraremos en un parque protegido que tiene unas puertas de troncos de madera que hasta hace poco estaban cerradas pero que ahora no existe ningun problema para acceder a este parque (si se va en silencio se podrá ver los arruis especie de cabra introducida por el hombre ),y ya por esta senda llegaremos a la cumbre.

Una vez allí tomaremos a la derecha para llegar en primer lugar al Pozo de La Villa y más adelante con el de Cartagena. Continuaremos dirección Este hasta llegar a la carretera durante unos 3 km. aproximadamente, a nuestra izquierda divisaremos la impresionante vista del Collado Mangueta y Barranco del Gallego.

La primera senda que se encuentra a la derecha señalizada con una cadena nos llevará directamente hasta la fuente de La Carrasca y desde aquí haremos el descenso por el mismo sitio por donde ascendimos.

Sierra Espuña es a menudo reconocida como una "Joya natural" de la Región de Murcia, es símbolo de recuperación forestal, belleza paisajística, lucha por la conservación de la Naturaleza y amor por su entorno.

La vegetación de Espuña es principalmente el pinar repoblado. Lo caracterizan tres especies: el pino Carrasco (es el más abundante), el Ródeno y el Negral. El encinar muy reducido aparece a partir de los 700 m. de altitud, matorral mediterráneo como la coscoja, enebro, lentisco, espino negral y genista. Formaciones especiales y mas reducidas como los sabinares de sabina negra y los caracteristicos culos de monja. En Los barrancos: olmos, chopos, sauces, madreselvas etc. En las zonas de cultivos encontraremos, nogales, serbales, fresnos, almendros, etc.

La fauna es variada: la ardilla, el jabalí, el azor (escaso), el arrendajo y el piquituerto o la culebra bastarda. En el espacio aéreo podemos ver el águila real, chovas piquirrojas, aviones roqueros. También el Arruí, y las huellas de escaso gato montés. Las fuentes y arroyos son punto de encuentro para la rana común, el sapo corredor o la culebra de agua.

Morrón de Sierra Espuña

Ruta de Senderismo: Sierra de La Pila (Fortuna)

Hoy hemos estado más tiempo en autobús que andando, y es que hoy es uno de esos días que salimos a buscar rutas fuera de nuestra comarca de Cartagena, en este caso al Parque Natural de la Sierra de la Pila.

Para llegar allí, salimos en el autobús desde Cartagena a 09.10 horas, por la autovía de Murcia. Pasamos esta capital y seguimos por la autovía en dirección Alicante hasta llegar a la salida de Fortuna, en donde dejamos la autovía. Pasamos junto al pantano de Santomera y el Museo del Agua y poco más adelante paramos en un restaurante (muy aficionado a la columbicultura), por detrás del cual corre un pequeño arroyo de aguas salobres que dicen que provienen de los cercanos Baños de Fortuna.

Tras 20 minutos de parada seguimos nuestra marcha. Pasamos por el centro de la ciudad de Fortuna, donde me llama la atención su iglesia, y a pocos kilómetros de la salida de dicha ciudad, los baños de aguas termales, famosos en esta provincia, junto con los de Archena, Mula o Los Alcázares.

Un pequeño despiste a la hora de tomar un cruce nos hace seguir un pequeño "tour turístico" por la comarca, hasta que, unos cuantos kilómetros más adelante, encontramos un pastor con su rebaño de ovejas que nos lleva al buen camino, es decir, a dar la vuelta por donde habíamos venido, por la misma carretera llena de baches y algunos tramos en obras. Esta vez sí que acertamos a tomar el desvío a "Fuente de la Higuera" que es donde tenemos que llegar, pero a unos 100 metros del cruce se acaba el asfalto y lo que sigue es una pista forestal de tierra, con baches, estrecha y muchas curvas y a veces cuestas empinadas, que nos hace dudar muy en serio de que vaya a llevar a este autobús de más de 13 metros de largo hasta nuestro destino (donde, por cierto, llevan rato esperándonos).

Nuestras dudas se disipan cuando, tras 3 o 4 kilómetros, aparece el letrero de "Área Recreativa de la Fuente de la Higuera" y los aparcamientos. Hemos llegado y allí está el Punto de Información donde nos espera Héctor, uno de los guías del Parque que es el que nos va a acompañar en nuestro recorrido y explicarnos las peculiaridades de este entorno natural.

Son las 12 de la mañana cuando empezamos en sí la marcha senderista. Lo primero que vemos es la fuente misma (que le da el nombre a este paraje) que, a pesar del letrero de "Agua NO potable", está llena de personas llenando garrafas de agua: nos comenta Héctor que el letrero es porque no está garantizada la potabilidad del agua, pero que en algún estudio que se ha hecho sobre su composición, se ha visto que es apta para su consumo. Seguimos junto a un curso de agua de la fuente y un abrevadero y enseguida tomamos una empinada senda con algunas pisadas de jabalíes, que nos lleva a una pista forestal que es la que vamos a seguir prácticamente todo el rato. A nuestra derecha queda la Sierra del Carche y enfrente unos roquedos donde habitan águilas perdigueras (aunque no vemos ninguna).

Mientras seguimos por esta pista forestal, Héctor nos va contando detalles de lo que vamos viendo como la vegetación, sobre todo pinos, coscojas y madroños (que le dan el símbolo al logotipo del parque) aunque no se dan por la zona por la que transitamos, los agujeros que forman los jabalíes al revolcarse en el barro fresco para quitarse los parásitos, las zonas de umbrías donde la humedad es abundante o el canto lejano de un pico real o pájaro carpintero.

Paramos en una zona de sombra, en la misma pista forestal, para avituallamiento, pero no mucho tiempo pues el guía tenía que estar de vuelta a las 15 horas (en principio la excursión estaba prevista de 10.30 a 15 horas). Tras reponer fuerzas seguimos por la pista y un poco más adelante tomamos una senda, marcada como PR (pero sin homologar) que nos lleva, tras un empinado ascenso al Albergue de Cabezo de Turra, a 915 metros de altura, desde donde se ve justo enfrente la estación meteorológica. Parece ser que hay una senda desde aquí que lleva hasta ella (que está sólo unos 300 metros más alta y es el punto más alto de este parque), pero no está previsto llegar alli.

Desde este refugio tomamos de nuevo una pista forestal, bajando hasta Puerto Frío a 834 metros de altitud y desde este punto seguimos por una carretera asfaltada (que es la que lleva hasta Fortuna), en dirección Norte, para volver a la Fuente de la Higuera que a esta hora (15:10), nos la encontramos llena de gente asando chuletas en las cocinas de piedra dispuestas para ello o bien comiendo la clásica tortilla o conejo frito con tomate de los días de campo. Todo ello nos invita a hacer nosotros también lo mismo y dar cuenta de lo que nos queda en las mochilas.

Nos despedimos de Héctor y su compañero del puesto de Información del Parque, que nos dan algunos folletos informativos y nos vamos al autobús para iniciar el viaje de vuelta. Son las 15.40 horas. Volvemos por el mismo camino de tierra que vinimos, pero ahora con la ventaja de saber que sí vamos a poder pasar por aquí y que sí que lleva a algún sitio, en este caso la carretera asfaltada, la cual tomamos en dirección a Jumilla, pasando por El Boquerón y Casablanca (en cuyo restaurante paramos un momento) y luego la autovía en dirección Murcia y Cartagena, a donde llegamos a las 18 horas.

Sierra de La Pila

La S¡erra de la Pila se sitúa en el cuadrante noroccidental de la Región de Murcia, entre los términos municipales de Abarán, Blanca, Molina de Segura y Fortuna. Los l¡mites actuales y normas de gestión del Parque Regional vienen definidos por el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN), aprobado inic¡almente en marzo de 1998. En total, este Espacio Natural Protegido cuenta con 8.836 hectáreas.

Se trata de un macizo montañoso que forma parte de las Cordilleras Béticas, siendo los materiales dominantes calizas, dolom¡as, areniscas, margas y yesos. Los picos más elevados son La Pila (1.264 m) y Los Cenajos (1.200 m), que dominan un paisaje escarpado y surcado por profundas ramblas con cauces normalmente secos. Desde estas cumbres se puede contemplar una panorámica regional impresionante.

La Sierra posee una gran riqueza vegetal, destacando la presencia de carrascales, sabinares y pinares, acompañados de un conjunto de especies, como el madroño, entre las que se encuentran numerosos endemismos del sureste español. La fauna es abundante, siendo las rapaces (Águila real, Halcón peregrino, o Búho real) y mamiferos como el Tejón, Garduña, Gato montés, o la Gineta algunas de las especies indicadoras de la gran riqueza faunística. El Parque Regional incluye un área declarada Zona Especial de Protección para las Aves (ZEPA) para la Chova piquirroja (Phyrrohocorax phyrrohocorax).

La Sierra de la Pila es uno de los espacios régionales propuestos como Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), susceptible de ser incorporado a la Red Europea Natura 2000.

PRINCIPALES INSTALACIONES Y SERVICIOS PARA EL VISITANTE.

Fuente La Higuera: Punto de Información al visitante e itinerarios guiados (sábados,domingos y festivos, de 10 a 15 h), área recreativa y de acampada, aparcamiento y fuente.

El Jave: Área recreativa, fuente y mirador.

Albergue Cabezo de Turra: Ayuntamiento de Fortuna (Telf: 968-68 51 03).

Peña Zafra: Alojamiento Rural (Casa Bonaire Telf 968-683044), Bar y fuente.

La Garapacha: Bar y fuente.

Casablanca: Restaurante.

La Zarza: Restaurante (Casa El Pino) y Fuente.

Para cualquier consulta, puede dirigirse al Punto de Información del Parque, o a la Dirección General de Medio Natural (Telf. 968-28 5853).

Sierra de La Pila (Fortuna)

Ruta de Senderismo: Perín - La Hoya

Tenían razón los monitores de Aguitura cuando decían, antes de salir, que hoy íbamos a tener unas estupendas vistas. Yo pensé que sólo íbamos a tener paisajes de interior, de montaña, pero, como podéis ver por las fotos, me equivoqué, para satisfacción mía y del resto de compañeros.

Hoy la ruta es por las cornisas y montañas del macizo que se extiende entre La Muela y Peñas Blancas, formado por una serie de cumbres que oscilan entre los 400 y 500 metros de altitud. Según la planificación, esta ruta estaba catalogada como FÁCIL, pero luego no lo resultó tanto.

El punto de comienzo de hoy está en la carretera que va desde Cartagena hacia La Azohía, por las cuestas del Cedacero. Pasamos el pueblo de Canteras; el cruce a la derecha que va a Perín; y una pequeña venta (“El Estanco”) a la derecha, acristalada, conocida popularmente como “La venta del huevo” (dicen que porque este elemento figura en todos sus platos, aunque yo no he tenido la ocasión de comprobarlo). Tras la venta, a unos 300 metros, en una curva a la izquierda (y antes de llegar al restaurante “Cedacero” que ahora se llama “La Nueva Hacienda” y lo mismo si leéis esto dentro de un tiempo ya le han vuelto a cambiar el nombre, pero que en definitiva, es el restaurante que está justo cuando empieza a bajar las cuestas del Cedacero) sale una carretera asfaltada que asciende nada más empezar y que lleva a unas casas donde hay una explanada para dejar los coches.

Partimos desde este punto, donde acaba la carretera asfaltada y continúa como camino ancho de tierra que es el que seguiremos en todo momento, aunque al poco de comenzar se pierde en un tramo en el que tenemos que atravesar un barranco (el barranco Herrado). Camino ascendente en casi todo el recorrido, y en algunos tramos, bastante empinado y aquí es donde está la dificultad a la que me refería al principio (bueno, en realidad, en estas subidas y luego en otra bajada que hicimos monte a través hasta Las Hoyas).

Ausencia de arbolado en todo el recorrido y sólo nos encontramos matorral bajo y espinoso, aliagas, marubio, y mucho tomillo en flor y algo de romero que perfuman el ambiente. También vemos bastantes apostaderos de los cazadores. Y al llegar arriba a las cornisas, frío, mucho frío procedente de un medianamente fuerte viento del Noroeste, que nos azota sin piedad favorecido por la ausencia de arbolado o elementos de abrigo. Bueno, tampoco hay que exagerar: habrían 4 o 5 grados, pero es que aquí, como ya he dicho otras veces, no estamos acostumbrados.

Y llegamos al punto del almuerzo: un espléndido mirador sobre lo que es la rambla de la Azohía y Bocaoria, en Las Rellanas, donde, resguardados del viento en la vertiente Sur de la cornisa, y de cara al cálido sol matinal, podemos admirar en este claro y limpio día, las bellezas de la costa mediterránea, muchas de ellas ya visitadas en otras excursiones: Cabo Cope, al fondo a la derecha, Mazarrón, La Azohía con la torre de Santa Helena, el valle donde se encuentra el Campillo de Adentro y la Rambla de la Azohía. Si seguimos girando a la izquierda vemos el macizo de Cabo Tiñoso, con las baterías de Castillitos y Atalayón y Cala Salitrona y siguiendo en este sentido antihorario, tenemos La Muela, Roldán, la Atalaya, Cartagena y el Mar Menor que se ve perfectamente a pesar de la distancia. Por detrás nuestra (al Norte) quedaría como referencia de interés, el macizo de Peñas Blancas, en cuya vertiente sur, que es la que vemos, podemos apreciar las minas de hierro abandonadas que allí se encuentran. Estos son los paisajes a los que me refería al comienzo.

La vuelta la hacemos por donde habíamos venido, por lo que el itinerario que en realidad hacemos no es exactamente el marcado en el mapa. Nos salimos del camino para bajar hasta lo que son Las Hoyas, monte a través, sin sendas, y con zonas de espesa vegetación de naturaleza espinosa. Así llegamos a una gran y frondosa pinada, la única que hemos visto en el día de hoy. En la bajada nos encontramos con un ejemplar de tortuga mora, quizás de las que libera la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE), aunque creo que la reserva que ellos tienen para este cometido no está por aquí.

Paramos un rato en la pinada, donde dicen que se acerca bastante gente los domingos a pasar el día en el campo y luego seguimos hasta la Casa de la Hoya que viene en el mapa y un nuevo camino (y posteriormente senda) que nos lleva de nuevo al camino principal por el que hemos subido por la mañana. Desandando lo andado llegamos a las 13.40 horas a la explanada donde comenzamos y con ello acabamos la ruta.

EL RECORRIDO

Duración: de 3 horas a 3,5 horas.

Dificultad: Fácil.

Desnivel: 491 mts.

Consejos: Itinerario circular con principio y fin en el mismo lugar, llevar botas de treking o zapato adecuado, agua, cámara de fotos.

Epoca aconsejable: cualquier época del año.

EL RECORRIDO: Tomaremos la carretera que va desde Canteras La Azohía. La venta "El Estanco" será nuestra referencia para tomar la siguiente senda a mano izquierda tornarla y dejar los coches en una explanada que hay junto a las primeras casas que encontramos.

En dirección Suroeste nos dirigiremos hasta una vaguada hacía Las Rellanas hasta llegar a la Morra de los Garabitos donde divisaremos un fabuloso paisaje de Mazarrón, La Azohía y Campillo de Adentro.

Tomaremos dirección Norte por un camino forestal que nos llevará hasta Las Hoyas por toda la cornisa del Collado de Boletes. En la Hoya se encuentra una pinada y una casa abandonada de pastoreo.

Al Noreste tendremos La Muela y el Cabezo de Las Estancias desde donde se divisa todo el Mar Mediterráneo.

Desde la casa de La Hoya tomaremos un sendero al Norte dirección La Morra del Quemado hacia el Cabezo Negro (470 mts.) y siguiendo a 500 mts. cruzaremos el barranco Herrado hasta el lugar donde dejamos los coches.

Durante todo el recorrido la vegetación es escasa encontrando plantas aromáticas y matorral de espino, solo al llegar a la Hoya tendremos abundante pino carrasco y alguinos almendros. La fauna es la perdiz, liebre, tórtolas. Es una zona propia de caza por lo que encontraremos apostaderos de cazadores.

Perín - La Hoya

Ruta de Senderismo: Cabezo de La Fuente - Los Belones

Si vamos por la autovía de Cartagena en dirección a La Manga veremos a la derecha, mucho antes de llegar al pueblo de Los Belones, la silueta inconfundible de 2 cumbres, solitarias y vecinas: a la derecha, el pico de la Fuente (o pico del Águila como también se le conoce) y a la izquierda el cabezo del Horno. Son las dos cumbres que se elevan en el Parque Regional de Calblanque, siendo La Fuente la mayor de ellas (342 metros) mientras que su vecino se queda solo en los 258 metros.
Se llama así porque en este monte hay un nacimiento de agua, oculto y debidamente canalizado hasta un aljibe provisto de un grifo donde mucha gente acude a llenar garrafas de agua para llevarse. Esta construcción del aljibe y la fuente ("Fuente grande en Cabezo del Cantalar") fue inaugurada en 1987 por el entonces alcalde de Cartagena D. Antonio Vallejo Alberola en su primera romería (no lo digo yo, lo dice un letrero tallado en un tronco, junto a la edificación).
Para llegar hasta allí, habrá que dejar la autovía en la salida de Los Belones y dirigirnos a esta

Ruta de Senderismo: Ruta Eólica en Portmán

Saludos, compañeros y amigos senderistas: os presento la primera salida de la Asociación Aguitura del nuevo milenio, siglo, decada y año. Será porque se acumulan todas estas circunstancias o por los propósitos del nuevo Año que siempre hacemos (“voy a hacer más ejercicio”, “voy a realizar actividades nuevas”…) o porque hay que rebajar los dulces, comilonas y demás excesos navideños, el caso es que hoy hemos batido nuestro récord de asistencia: nada menos que 111 personas que nos hemos puesto las botas para patear las sierras cartageneras.

La de hoy es una ruta fácil y nueva pues vamos a visitar unas instalaciones que hace poco tiempo que existen: la han llamado la ruta minero-eólica pues eso es lo que vamos a visitar, la estación eólica de la Sierra Minera de Portmán, concretamente en el monte de Sancti-Spíritu, que fue inaugurada en diciembre del año 2.000.

El punto de partida es la explanada del cementerio de Portmán (que no me da muy buen presagio), que se llena por completo de coches cuando llegamos todos. Portmán ya sabréis donde está (por anteriores rutas que he comentado), pero si no, recordaros que se va por la carretera de La Unión y poco antes de llegar a esta ciudad, en la gasolinera y pueblo de La Esperanza, desviarse a la derecha, a 6 kilómetros está el pueblo de Portmán y el cementerio queda tomando un desvío señalizado, a la izquierda, a la entrada del pueblo.

Desde el cementerio, por la izquierda parte la senda, que al principio transcurre junto a una rambla y luego se desvía de ella hacia la derecha, empezando a ascender. Allí enfrente y a unos 320 metros de altitud se recorta la silueta de los 8 gigantescos molinos que forman la central eólica y que serán nuestra meta de hoy.

Al poco de empezar la subida, paramos para ver la panorámica de la bahía de Portmán, con su pequeño pueblo pesquero, y más allá los estériles arrastrados de las minas que forman lo que debería ser playa, el puerto pesquero a la derecha y el faro a la izquierda. Esperemos que algún día limpien y retiren estos estériles mineros que durante muchas décadas se han ido acumulando y la playa de Portmán presente mejor vista que la que tiene en estos momentos.

Seguimos la ascensión por una senda que a veces se pierde y que no está señalizada, entre pinos, tomillos y lavandas, que hacen que el aroma sea muy agradable. El paisaje es gris con matices ocres, formado por rocas y estériles de las antiguas minas, que, aunque no tiene el esplendor de los verdes de los bosques y los azules de las costas y playas, sin embargo forma parte también de la diversidad paisajística de nuestra comarca.

Poco antes de llegar a la cima, pasamos junto a la última explotación minera que estuvo en funcionamiento hasta 1.982, la de Sancti-Spíritu, igual que la montaña que la acoge. Allí mismo, al pie de los molinos (¿o serán gigantes?) los monitores nos explican un poco las características de esta central eléctrica.

Continuamos la ascensión y llegamos a una explanada, casi al pie del segundo molino, que es el punto más alto de nuestra ascensión, y es también donde paramos para el descanso. Una magnífica panorámica se nos ofrece ante nuestros ojos, desde Escombreras hasta la Manga del Mar Menor; lástima que la bruma existente nos impida ver el paisaje con más claridad (¿bruma o contaminación?).

Tras el descanso, iniciamos el descenso, esta vez por otro camino diferente al de subida, que sale por la derecha desde la explanada donde está la mina. Pasamos junto a la boca de una mina abandonada, un pozo de agua (con brocal, sin peligro) y un “lago” seco donde se acumulan las aguas de lluvia que descienden por los terraplenes de estériles.

Casi al final del recorrido nos encontramos ¡oh, sorpresa!: una cascada de agua que proviene de una canalización que hay más arriba y que no sabemos de dónde procede, lo único que me atrevo a asegurar es que es “agua mineral”.

Cruzando la rambla, volvemos de nuevo a la senda inicial y con ello acabamos el recorrido, que hoy ha sido especialmente corto y fácil pues lo hemos hecho en 3 horas y media, contando con los varios descansos realizados.

EL RECORRIDO

Duración: de 3'30 horas a 4 horas.

Dificultad: Fácil.

Desnivel: 387 mts.

Consejos: Llevar botas, agua, cámara de fotos y gorra. Aconsejamos precaución ya que existen muchos pozos en la zona aunque estos se encuentran con brocal. En la bajada por los estériles tendremos cuidado ya que pueden existir derrumbes en el suelo, no acercarse a la orilla de estos estériles.

Epoca aconsejable: cualquier época es buena pero es más aconsejable en primavera y otoño por el calor que suele hacer en la zona.

EL RECORRIDO: Iniciaremos el recorrido en el cementerio de Portman dirección norte por una carretera de piedra rota por el paso del tiempo y el agua de lluvia.

Siguiendo esta carretera en zigzag empezaremos a ascender hasta tomar una senda poco delimitada que nos conducirá hasta otra carretera que sube a la mina del Santo Espíritu, última mina que se cerró en el año 1.982. Desde aqui se divisa una bonita vista de la bahía de Portman y de todos los estériles que se han producido a lo largo de muchos años de extracción. Subiremos por la Loma Fortuna hasta casi la base de uno de los ocho molinos de energía eólica inaugurados a finales de Noviembre del año 2.000.

Bajaremos por el Cabezo Las Lajas y siguiendo una carretera de tierra en buen estado llegaremos al final del barranco Cabezo del Pino bajando en zigzag encontramos a la derecha restos de un castillete y el riachuelo de un lavadero. Desde aquí divisaremos Portmán y el cementerio donde iniciamos la ruta.

Por realizarse la ruta por un laberinto de caminos producidos por los estériles aconsejamos no perder de vista al guía de AGUITURA. Esta ruta es proyectada, planificada y llevada a cabo por las guías de AGUITURA, por lo que las indicaciones que exponemos son de manera orientativa ya que no se encuentra marcada con las señales de P.R. AGUITURA no se responsabiliza de las personas que la realicen por su cuenta.

Parque Eólico de Portmán

Este parque fue inaugurado el día 19 de Diciembre de 2000. La inauguracion se llevó a cabo por el presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia D. Ramón Luis Valcarcel y por el alcalde de la Unión D. José Manuel Sanes.

El Parque Eolico de la Unión es el segundo más grande de la Región, el pirmero es el de Cieza. Se compone de 8 Generadores Cada uno de estos generadores tienen unos mástiles de 60 metros y son los más altos de España. Estas máquinas generan 5,2 Megavatios de potencia que equivalen a 20 millones de Kilovatios anuales de potencia, esta energia es volcada a la red de Iberdrola por medio de una central construida en la sima de la Sierra Minera.

El proyecto cuenta con el apoyo técnico y financiero del Ministerio de Ciencia y Tecnología. La inversión realizada en su construcción ha sido de mil Millones aunque se tiene prevista la ampliación para conseguir los 60 millones de Kilovatios de produccion Por el momento la plantilla es de 20 trabajadores.

Ruta Eólica en Portmán

Ruta de Senderismo: Cresta del Gallo

Hoy toca usar el autobús, pues hoy vamos a andar por el Parque Natural de El Valle, concretamente por la Sierra de la Cresta del Gallo, situada un poco al Sur de la capital murciana, a unos 50 kilómetros de Cartagena. Pero hoy, y por primera vez, han hecho falta 2 autobuses para trasladar todo el personal, pues seguimos siendo más de 100 participantes y es que parece ser que este deporte se está haciendo cada vez más popular, por su sencillez y las satisfacciones que ofrece.
Así que, una vez hechos los controles de personal pertinentes y "pasada lista", partimos por la autovía en dirección Murcia, hacia las 9.10 horas de la mañana. Dejamos la autovía en la salida de La Alberca y atravesamos esta población, Santo Angel y Algezares. El autobús nos deja en un punto de esta última localidad que, a decir verdad, no sabría deciros dónde es exactamente. Sirva como referencia que, al empezar la ruta, atravesamos una zona de dúplex nuevos y otros en construcción y al poco llegamos al cementerio de Algezares, que os puede servir de referencia como punto de partida (últimamente los guías de Aguitura le tienen especial "cariño" a los cementerios).

Ruta de Senderismo: Cejo de los Enamorados (Lorca)

RECORRIDO: Mirador de Lorca - Grifo de los Pilones - Sierra Peña Rubia

Duración: de 3 a 4 horas. Aproximadamente 8 Ktms.

Desnivel: cota máxima alcanzada: 764 m. en el Cejo.

Dificultad: fácil. Sendero de suave inclinación. Bajada un poco más inclinada.

Consejos para la marcha: Llevar ropa adecuada (evitar colores llamativos). Respetar y cuidar la flora y fauna. Seguir las señalizaciones de las rutas. Dejarlo todo tal y corno te gustaría encontrarlo la próxima vez que vuelvas

Epoca aconsejable: cualquier época del año (aunque mejor en primavera).

EL RECORRIDO:

La gente más anciana de Lorca, la que conoce los vientos y el color de las nubes, dice que hace mucho tiempo, por un barranco muy alto, se arrojaron dos enamorados. Un caballero musulmán y una dama cristiana, no pudiendo casarse a causa de sus diferentes religiones, prefirieron despeñarse por amor antes que vivir separados. Para recordar la histora de los dos pobres amantes, la Naturaleza hizo bortar del yermo paraje una fuente, en lo que desde entonces fue conocido como "Cejo de los Enamorados".

Ubicado en la cara norte de la Sierra de la Peña Rubia. Se comienza la ruta en la Plaza de España (Lorca), donde podemos visitar la Plaza del Angel de la Fama, la Colegiata de San Patricio, la fachada del Ayuntamiento, la Casa Pósito y el Archivo Municipal.

Por empinadas calles que fueron zoco y judería, cruzamos el atrio de Santa María y cogemos la carretera de la izquierda, llegando al primer mirador desde donde podemos disfrutar de una espléndida vista de la ciudad de Lorca y su fértil valle. A nuestra espalda quedan cuevas que estuvieron habitadas hasta los años 60.

En la primera parte de la ruta pasamos por una zona donde predominan las gramíneas (esparto, lastón) y cardos, plantas muy resistentes a la sequía aunque unos juncos delatan la existencia de agua a poca profundidad.

Vamos atravesando o vadeando distintos puentes hechos para resguardar de las avenidas la tubería que conduce el agua del Cejo. Estos puentes están ubicados sobre ramblas y barrancos. Aquí la vegetación aprovecha este aporte de humedad (adelfas, zarzas, rubia peregrina, clavel silvestre,... ). Cuando la senda cruza la carretera, nos encontramos en una zona de yesos, donde podemos observar la vegetación característica. Esta carretera nos llevaría en 2 km. de esfuerzo a un mirador con vistas sobre la comarca.

A mitad del recorrido podemos encontrar romeros, albaidas, curry, malvas, tapeneras, coscoja,... y una indicación que nos conduce al "Mirador del paisaje", desde donde podemos admirar las principales sierras del suroeste murciano, el río Guadalentín y los grandes contrastes de vegetación en la montaña donde predomina la albaida o el esparto segun el suelo sea rojizo o amarillento respectivamente.

Y de aquí vamos por fin directos al Cejo, que es una pared vertical de arenisca erosionada por el viento en la que se pueden encontrar fósiles de entre 5 y 20 millones de años. La vegetación predominante es el pino carrasco, junto a jaguarzo morisco, marrubio. espino negro jara, lentisco, uña de gato y enebro.

Una vez que llegamos a las faldas del Cejo nos encontramos con una fuente canalizada que procede de un acuífero subterráneo que aflora a la superficie de forma natural.

Desde aquí tenemos algunas alternativas, como enlazar con la ruta de la Rambla de Cambrón o con la Rambla de los Diecisiete Arcos. Disfrutaremos viendo vegetación característica de ramblas, del trabajo erosivo del agua y de antiguos cortijos rodeados de cultivos tradicionales.